After a good job, your signature.
No todas las personas pueden trabajar en el campo de la cirugía. Esta especialidad requiere una gran capacidad de resolución de problemas, resistencia, compromiso y sacrificios al conjunto de profesionales de esta rama, con especial mención a las mujeres cirujanas, ya que para ellas ejercer esta profesión siempre ha supuesto un reto aún mayor.
La perspectiva de la mujer cirujana: Prof. Lorenza Driul
Cirujano en la Azienda Sanitaria Universitaria Friul Centrale, Udine, Italia
Galería de vídeos
-
Prof. Dra. Natascha C. Nüssler
Cirujano de la München Klinik Neuperlach, Múnich, Alemania
-
Dra. Pilar Pinto
Cirujano del Hospital Universitario Río Hortega, Valladolid, España
Mujeres cirujanas: una historia repleta de obstáculos
Según es sabido, las mujeres ya practicaban la cirugía incluso 3500 años antes de Cristo[1], aunque lo hacían sin educación formal, sin reconocimiento o en secreto.
Son muchas las historias que ponen de relieve los obstáculos que han debido sortear las mujeres para ser cirujanas. Se sabe que incluso se hacían pasar por hombres para poder ejercer. El caso más sonado es el del doctor James Barry, el primer cirujano que realizó una cesárea con éxito en el siglo XIX y que resultó ser en realidad una mujer: Margaret Ann Bulkley.[2]
Escasez de mujeres cirujanas
En la actualidad, aunque el número de mujeres ha aumentado en la medicina, las cirujanas siguen siendo una minoría y cuentan con poca representación en los puestos de mayor responsabilidad y liderazgo.
Las razones por las que las mujeres optan por especialidades no quirúrgicas son diversas. Los estereotipos de género y la percepción social del papel de la mujer son factores de peso.
Por otra parte, es difícil ignorar la reputación de baluarte masculino que siempre ha tenido la cirugía. Esto puede desalentar a las mujeres a la hora de elegir una profesión que se considera exigente y competitiva en un mundo en el que todavía hay sectores en los que se cuestionan las habilidades en función del género.
Perspectivas de futuro
La cifra de mujeres cirujanas debe crecer en todo el mundo y está en nuestras manos promover el cambio. Las asociaciones de cirugía, las universidades y los hospitales pueden establecer planes específicos para abordar la discriminación de género y no penalizar profesionalmente a las mujeres que son madres. De forma individual, cada profesional del campo puede contribuir a ello y también puede hacerlo la industria.
Por eso, desde B. Braun también queremos hacer nuestra propia aportación en el camino hacia la equidad en la cirugía dando visibilidad y voz a las mujeres cirujanas, no solo para que sean un modelo y una motivación para las nuevas generaciones, sino también porque nos enorgullecen.
[1] Wirtzfeld, Debrah A. “The history of women in surgery.” Canadian journal of surgery. Journal canadien de chirurgie vol. 52,4 (2009): 317-320.
[2] Bourjeily, Ghada, and Sangeeta Mehta. “Gender diversity in Obstetric Medicine.” Obstetric medicine vol. 12,2 (2019): 55-56. doi:10.1177/1753495X19851711